CÁMARA NACIONAL DE LA
INDUSTRIA EDITORIAL MEXICANA
1er Foro sobre políticas públicas de la red del libro
Democratización de la cultura: distribución y
comercialización del libro
Las Librerías y la IV Transformación de México
Luis Guillermo Garcia Ruiz
La mejor
expresión… del Ancien Régime,
es la
supresión del lenguaje, es la pinza que asfixia a la palabra
y la hace
cautiva del poder (1)
1.
Introducción
Existe un falso dilema en torno a la lectura,
los libros y las librerías, que acapara la atención de una buena parte de los
interesados: editores, correctores de estilo, traductores, académicos,
promotores de la lectura, impresores y encuadernadores, en fin, a todos los que
participan en la cadena del libro y la lectura.
Parece que es urgente resolver los asuntos de
economía y de tecnología, para anticipar el porvenir del medio (y el soporte
del medio) –la causa primera o material, el Libro-; en que se habrá de llevar a
cabo el objeto de ella –la causa formal, la Lectura-; sin entrar a discutir la
causa final del proceso: la formación de lectores, el acceso al conocimiento,
la palabra escrita, la comunidad política, la felicidad del Estado.
Se invierten las partes y entonces la robótica,
la cibernética y la informática adquieren patente
de corso sobre un tema que es ante todo político, porque trata sobre la
naturaleza mayor de la humanidad, que es la palabra.
Se soslaya que en la forma en que se organizan
las comunidades, es la que determina las políticas públicas que atañen a la
educación y a la cultura, y en seguida a las estructuras de producción, el tipo
y propósito de los algoritmos de lo que sea, y el comercio de sus productos.
“Iría más lejos… si dijera que la literatura de
una nación está subordinada siempre a su estado social y a su constitución
política…hay otras causas que imprimen ciertos caracteres a las obras literarias…
aquéllas me parecen las principales (2)”
Que es el Estado el que determina la literatura
(3) y por ello a la naturaleza de las librerías. En la realeza florecerían librerías regias,
en el Estado aristocrático, nobles. Así sucede respectivamente para las
librerías en las comunidades donde ordenan los principios de la plutocracia (acumulación
de riqueza), de la democracia (librerías para las mayorías pobres); y, si es
posible hablar de librerías en las tiranías, serán aquellas que privilegien el
fanatismo y el temor a la muerte.
En la República, en México, la Librería Ideal
será republicana: “Ya que se dice y se sabe que las Librerías, más que vender
libros, somos Centros Culturales: recintos para el encuentro entre autores y
lectores, oráculos donde encontrar resoluciones a las dudas de cada uno y de
todos, ventanas para asomarse a lo desconocido, puertas para abrir, espacios
infantiles, diálogos con la historia, arcanos de poder, valladares contra el
oscurantismo, barreras infranqueables, la última línea contra el despotismo de
los gobernantes” (4)
Al renacer en la Cuarta Transformación de
México, definir a la Librería Ideal como “aquella que combate con el gusto por
la lectura, los vicios del alcohol, las drogas y la violencia” (5), es
comprender con prudencia e inteligencia, la naturaleza y el papel que ocupan
las librerías.
Quizás en los 70’s, habría que hablar de librerías
que llevarían la lectura “arriba y adelante”; en los 80’s, de librerías que
defenderían a la lectura como un perro,
atravesando el tiempo en que a las
librerías “ni las ven ni las oyen”, hasta arribar al estado de grima nacional,
cuando las librerías no puedan recomendar ni tres libros que han marcado sus
vidas.
Librerías con vida política: vida activa, despierta, en constante cambio, libre, justa, sensible y prudente, administrada por la inteligencia imaginativa, que haga de la valentía ciudadana, su virtud cardinal. Vida política significa el carácter real, que da el gobierno propio. La autarquía, el poder de ser principio de uno mismo: deliberaciones, decisiones, en general, acciones ante causas externas.
La
Librería ideal en la Cuarta Transformación debe ser una empresa en revolución y
con responsabilidad social, donde brille el oficio del librero. Que anteponga
la Autoridad del Fomento a la Lectura,
sobre el principio comercial de la máxima ganancia.
“… a nuestra
región le favorece la oferta comercial que combina lo que es muy productivo y
muy barato, sobre lo que es caro y poco productivo, en vez de lo que es barato
pero poco productivo, e incluso sobre lo muy productivo, pero caro” (6)
2. Exposición de motivos
He aprendido de dos eminentes Maestros
mexicanos, a cual más de discretos y distantes de los reflectores, además de
regios: hablar exclusivamente de las
cosas investigadas y publicadas. Gabriel Zaid y Patricio Marcos.
Hablo a nombre de las “Chicas LibrArte” (7),
quienes están por presentar en fecha muy próxima, al primer hijo de la nueva
cruzada, que llevará el nombre de Editartex*,
por lo que voy a abordar en este 1er Foro sobre políticas públicas de la red
del libro, al que convoca la
Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) a partir del texto
en preparación, del que cito como un adelanto que trata sobre “Filosofía, gobierno,
educación, salud, política, bienes del alma, del cuerpo, bienes exteriores,
gimnasia, arte, higiene, libros, danza, baile, comunidad, lectura, ocio y
alegría” (8).
Para presentar nuestro
caso, como un Modelo Regional de
Librería Nacional (9), que se sintetiza en una sátira: Mente Sana en Cuerpo Sano.
Veamos: “Es imposible
construir el cambio de la noche a la mañana, pero sí lo es hacerlo por
aproximaciones sucesivas. En este contexto se inscribe LibrArte, un modesto
pero importantísimo proyecto que no parecería realidad si no es por los datos
que así lo confirman.
LibrArte es una librería que ha ganado diversos
premios, como el de Emprendedores Estado de México 2015, el Premio Nacional de
Librería de la FIL de Guadalajara 2016 y el Premio Nacional de Fomento a la
Cultura y a la Escritura 2017, organizado por primera vez por la reciente
Secretaría de Cultura federal… por su importancia e implicaciones, el asunto
trasciende a la fuente cultural.
El primer punto que le da un rasgo distintivo
es que se trata de un proyecto que nace en el interior del país, y no de
cualquier región de nuestro convulso país, sino de Tierra Caliente, zona
ubicada entre Michoacán, Guerrero y el Estado de México.
Si lo
anterior no fuese suficiente, cabe mencionar que LibrArte es administrado y
dirigido por mujeres, lo que en un país con una tradición machista,
especialmente en las regiones menos desarrolladas de México, es toda una
odisea.” (10)
“Yo creí que era fácil, pero no.
Este es un
monstruo concebido por monstruos para producir monstruosidades” *
3.
Escenarios
Nos
llaman de diferentes maneras: Para la Cámara Nacional de la Industria Editorial
Mexicana somos librerías independientes, en tanto no pertenecemos a ninguna de
las grandes cadenas libreras que existen en el país, y porque nuestra actividad
no va de la mano con la asignación de un presupuesto anual, de algún
conglomerado público o privado: porque nuestras decisiones de compra y
operación diaria no dependen de resultados medidos por parámetros ligados
estrictamente a lo económico.
Nos reconocen también como librerías tradicionales,
como aquellos comercios dedicados a la venta exclusiva o principalmente de
libros, en local establecido con acceso al público en general, con inventarios
permanentes y/o virtuales, con venta al menudeo a distancia y/o a domicilio.
Nos gusta usar el término librería de barrio “que toma
cada vez más fuerza en el argot librero, pese a que no está formalmente
definida en ninguna de las estadísticas o glosarios de la industria y sus
instituciones, es decir, no existe un apartado formal donde se tome al barrio, a la comunidad, no solo como
comprador final de los productos
ofertados por la librería, sino como un sistema que se encuentra en constante
diálogo con ésta y que la retroalimenta día a día al hacerla partícipe de sus
necesidades y que a cambio recibe no solo una oferta de libros, sino de otras
actividades complementarias” (11)
Pero si hay un rasgo en común que caracteriza a
la mayoría de nosotras las librerías independientes, es que somos empresas familiares, pequeños establecimientos, y que
somos muy pocas librerías; que hacemos esfuerzos enormes para sobrevivir frente
a las barreras a la entrada de competidores, en un mercado con profundas
irregularidades comerciales y agresivas prácticas discriminatorias, e incluso depredadoras, por ambos lados de la
moneda librera: La oferta y las editoriales, tanto como la demanda y las
cadenas libreras.
“Por eso es que hay otra clasificación, que
considera que las Pequeñas Librerías Independientes, llevamos a cabo prácticas
creativas que pueden considerarse experiencias de resistencia, en un contexto en el que las manifestaciones
artísticas se ven relegadas a un segundo plano, en comunidades donde muchas
veces no se cumplen las necesidades básicas como seguridad y trabajo.” (12)
En esta circunstancia es en el que hay que analizar la propuesta que presentamos ante este Foro: “Porque somos una especie de Librerías que estamos a contracorriente con la tendencia del mercado librero en México, de oligopolios y oligopsonios, de élites en urbes sobrepobladas, de plagios y estancos en un mercado distorsionado, incapaz de acceder con el libro y la lectura a regiones y municipios alejados de las ciudades y capitales de la república mexicana” (13)
En un escenario de enormes mayorías de gente
apasionadas por la igualdad numérica y de pequeñas minorías poseedoras de enormes fortunas;
esclavas unas de la libertina-libertad y las otras del amor desmedido por el
dinero, se requiere en México la
presencia de un agente diferente, que privilegie los valores republicanos, que
honre las virtudes de la ética, que comparta el conocimiento, que anteponga el
interés social y con el ejemplo, frugal, fraterno y con valentía, demuestre en
sus barrios y municipios, las excelencias de la felicidad del alma humana.
Con menos de 600 librerías en México y 1724
puntos de venta, de los cuales 537 se localizan en la Ciudad de México, existe
un grave problema para un país con aproximadamente 2500 municipios, lo que
significa que hay una librería por cada 200 mil habitantes. No resulta extraño
que 40% de la población mexicana afirme no haber entrado nunca a una librería y
que el 94% de los municipios no cuenten
con ninguna librería. (14)
Municipios en poder de grupos conservadores
beneficiados con el no leer y escribir. Urge que en el proyecto de nación, se
incorpore la cultura del libro y el fomento a la lectura entre la población,
con base en políticas públicas que atiendan al justo medio republicano, que aprovechen
el peso que tiene la democracia, como responsable de extender el gusto por las
letras en la sociedad, porque “la muchedumbre de lectores va siempre en
aumento” (15), sin desatender a las oligarquías de nobles (aristocracia), de
aquellos notables que se dan el tiempo necesario para hacer de la lectura un
placer y de los libros, un tesoro.
Y es que tal y como
la conocemos, la cultura del libro es antes que nada una cultura masiva… “La
democracia no solo hace penetrar el gusto por las letras en las clases
industriales, ella introduce el espíritu industrial en el seno de la
literatura” (16)
No es casual que las sentencias
anticipadas en la obra de Alexis de Tocqueville sobre los EUNA hacia el primer
tercio del siglo XIX, se ajusten con el panorama actual que priva en nuestro
país. Son consecuencia de la integración de nuestros mercados con la economía del
socio comercial.
Con un agravante, que
la expansión en el mundo comercial de las “start-ups, que
impulsaron la revolución informática… “se han convertido en serias amenazas, monopolios
globales, bajo la lógica del ganador toma todo -winner takes all-
hasta
el punto que no podemos ignorar que Google,
Amazon, Facebook y Apple, (GAFA) constituyen una amenaza, porque sus posiciones
dominantes, su lobby corporativo, su control de nuestros datos y el poder de
sus algoritmos se encaminan a dirigir lo que todos debemos ver, saber y
consumir…” (17)
Que no es el Destino Manifiesto para México. “Entre
los pueblos civilizados de nuestros
días, hay pocos en los que la ciencia alta haya hecho menos progresos que en
los Estados Unidos, y provisto menos artistas grandes, poetas ilustres y
escritores célebres… no hay educación literaria en las democracias… Ellos aman
los libros que se procuran sin pena, que se leen velozmente, que no exigen
investigación erudita alguna para ser comprendidos… Habituados a una existencia
práctica… monótona, necesitan emociones vívidas y rápidas… que los saquen de sí
mismos al instante y los introduzcan de un solo golpe y como por violencia, en
el meollo del tema…” (18)
Y que lleva a un
dilema crucial para México: Conservar el modelo de mercado editorial que
prevalece, concentrado en centros urbanos, en los libros que más se venden,
bajo el poder de oligopolios y oligopsonios o escuchar autoridades que alertan “abunda
la repetición de lo aprendido, falta imaginación y existe temor al cambio” (19).
Transformar la
estructura y composición del mercado del libro, con todo lo que esto implica,
primero que nada, reconociendo la naturaleza y el papel de las librerías, más que como punto de venta, de fomento a la lectura y a
la creación de lectores.
“Una civilización sin libreros es inimaginable… Pero para
competir con la www las librerías del futuro serán distintas de las
hipertiendas concebidas para masas que ahora dominan el mercado. Las tiendas (Librerías)…
del mañana tendrán que ser lo que la Web no puede ser: tangibles, íntimas y
cercanas al domicilio… (20)
"La
lectura puede darnos paz, es un vehículo para la paz”
Beatriz Gutiérrez
4. Justificación
A raíz de la crisis librera que se vive en el
país, producto de las muy pocas librerías establecidas, han surgido diversas
propuestas desde los sectores social y privado, tendientes a organizar,
promover y fortalecer estos establecimientos, donde los libreros fungen como mediadores
culturales para acercar los libros, la lectura y otras manifestaciones
artísticas a sus comunidades.
Consideramos que, contrariamente a la especie que
condena a las librerías a la cuasi desaparición, a causa de las nuevas formas
de consumo online, basadas en el modelo anglosajón de naturaleza oligárquica,
enfocadas exclusivamente a la obtención de ganancias comerciales, las librerías
independientes en México representamos un baluarte fundamental en el proceso de
Transformación de la República Mexicana y un mentís en toda la línea de
flotación a la afirmación repetida, de que México se encamina a ser un país sin
librerías.
Hay tres razones que
demandan restaurar la república en México y en todas ellas, las librerías podríamos desempeñar un papel
clave en este proceso de sanación política (21):
1. Porque cuando triunfan las repúblicas desaparecen
de la sociedad, cuál si se tratase de un acto de magia, los muy ricos y los muy
pobres. Es la fusión de los criterios oligárquicos y democráticos con los que
se arriba a la justicia del orden político republicano, el justo medio donde
reina la libertad y la virtud.
2. Porque la única manera de conseguir un
estado justo y por tanto bien ordenado, es que los ciudadanos tengan una vida
superior y rica en excelencias del alma, una vida política, activa, de otra
naturaleza a la vida dormida que se propala como sinónimo de felicidad en las
oligarquías, de hombres famélicos de bienes externos, por padecer ayuno
permanente de bienes internos.
3. Porque la constitución de una república,
es la capacidad de las sociedades humanas para recobrar su salud y recuperarse.
Son tres premisas, suficientes y necesarias para
urgir que las pequeñas librerías, las de barrio, las independientes, las
grandes cadenas o las librerías públicas, antepongan sobre el principio
empresarial del comercio de libros, la autoridad del Fomento a la Lectura y la
creación de Lectores: garantes del acceso de la lectura activa a los ciudadanos
libres, a las mayorías sociales, a las clases medias ilustradas, investidas de
la necesaria valentía y la virtud de la justicia social.
Con la voluntad se hacen
milagros *
5. Propuesta
Hace muchos años,
fui requerido para elaborar un documento que ayudara a conocer la situación que
prevalecía en el mercado de la Informática en México Mi formación profesional y trabajos de
investigación de ese entonces, fueron factores determinantes para que me
hiciera cargo del proyecto auspiciado por la ONU-IBI, a solicitud del
Presidente del Instituto de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
El gobierno
necesitaba un diagnóstico y pronósticos sobre un mercado que desconocía por
completo y que obedecía exclusivamente a los intereses de la poderosa IBM. Todo
el sector público se movía atendiendo los manuales de operación del gigante de
la “computación”.
Considero necesario
traer a colación otra experiencia curricular, para explicar el mercado
editorial y la lectura. Por las mismas fechas, antes de decidir emigrar del
D.F. me encargué de un Sistema Nacional de Orientación Educativa, promovido
personalmente por el Secretario de Educación Pública, quien buscaba que la elección
escolar de los jóvenes estudiantes de nivel medio superior, se basara en un
solo elemento: información. Reyes Heroles no quería saber nada de los
especialistas en orientación que únicamente desorientaban.
Algo semejante
ocurre en la actualidad con el mercado editorial y de lectura en México: la
tecnocracia, dedicada a modelar matemáticamente el porvenir de la nación y los
especialistas vocacionales de antaño, son los agentes que representan a las
grandes editoriales y a los promotores de los libros y la lectura de hogaño.
Llevamos solo cinco
años como librería independiente y los argumentos para el apoyo y el fomento a
la lectura son los mismos que escuchamos desde el 2013: Quienes representan a
las editoriales –la oferta- se concentran en los asuntos del precio único de libro, la exención del impuesto al valor agregado,
y, en los presupuestos para la edición de los libros de texto gratuitos. En
tanto que los que abordan el consumo –la demanda- de libros y lectura, se
enredan en programas, contenidos, opiniones retóricas, que podrán ser importantes
para la producción de libros o para la educación nacional, pero que no resultan
de utilidad para las librerías independientes, menos las que estamos todavía en
resistencia, las pocas que existimos en los parajes alejados de los centros
urbanos.
Un mercado
oligopólico controlado por unos cuantos jugadores que imponen las reglas de
mercado, la concurrencia y competencia, y que deliberadamente invitan a que la
gente no lea; además de las librerías en línea, que juegan con el “dumping”
(envío sin costo), los derechos de autor, el ISBN (fast track), enfocadas en la
venta de libros, pero no en el fomento de la lectura.
Apenas en el 2017,
la naciente Secretaria de Cultura “descubrió” que la lectura se fomenta “desde
las librerías” *: Así están las cosas, nosotros obtuvimos el primer
reconocimiento que se otorgó en México por este motivo y pudimos constatar el
estado que guarda la cultura de la lectura, en el día de la entrega del
Premio al Fomento a la Lectura y Escritura, un 20 de noviembre, en el lugar donde
estuvo instalada y funcionando casi por 60 años la Refinería de Azcapotzalco de
Pemex. Porque nadie, excepto Cristina LibrArte, recordó y mencionó este hecho
fundamental para toda buena librería.
Pero las librerías
son negocios y deben ser autosuficientes para garantizar una vida ordenada y
moderada, y no como el caso muy desafortunado y entrañable de la Librería
Catarina Marina, que tras obtener en 2014 el VII Premio Nacional de Librerías y
varios premios más, cerró sus puertas en 2016, tras reconocer, “la traductora y
librera Sonia Verjovsky, que en siete años de trabajo diario, ni ella ni su
hermano y socio cobraron un sueldo una sola semana” (22).
Porque la apuesta de
Sonia Verjovsky, constituye un modelo empresarial de librería, divorciado de la
realidad nacional (23). Las nuevas librerías en
la IV Transformación deben fomentar la lectura, crear lectores y
combinar el ocio con el negocio. Librerías adentradas en la constitución real
de México, con una oferta de libros baratos, clásicos, que privilegien las
bellas letras en vez de best sellers; que atiendan a las mayorías nacionales, leer
para saber, para informarse, para entretenerse.
Organización.
Consideramos que las librerías son un baluarte en el proceso de la IV
Transformación en México que requiere de acciones tendientes a organizar el
mercado del libro de manera diferente:
II. Convocar a la organización de
una Cámara Nacional de Librerías Independientes, Agentes Mediadores y de
Fomento a la Lectura**; o que la CANIEM, extienda sus miras hacia la parte de
la industria editorial que trata el comercio de libros, y las librerías (24).
De Apoyo y Fomento: Democratizar
la cultura exige promover la distribución y comercialización del libro y eso
significa apoyar a las librerías en México y fomentar la apertura de nuevas
librerías, a nivel municipal, con políticas públicas que:
I. Considere a la lectura como política de
salud pública: fomentar la lectura como terapia preventiva, higiene saludable para
neutralizar los defectos particulares y malestares sociales.
II. Apoyar programas que den empleo a
personas de cualquier edad, que puedan colaborar en el proceso de higiene
lectora.
III. Créditos blandos para la adquisición de
equipo, mobiliario, publicidad.
IV. Apoyar la capacitación. Es indispensable
la profesionalización librera, pero es imposible cubrir las cuotas que cobran
las instituciones especializadas.
V. Hacer de los espacios públicos, auténticos
convites a la lectura, la cultura, el arte y la gimnasia. Hacer divertido y sano
leer, saber y emplear el conocimiento.
VI. Canalizar apoyos sociales, en forma de
vales o créditos a cambio de libros.
VII. Invitar al magisterio a ser
protagonista de esta empresa. Visitar librerías y anticipar los libros que usarán en las escuelas públicas y privadas.
VIII. Avalar
a las librerías para recibir crédito y fondos editoriales.
IX. Apoyos
fiscales para editoriales y librerías en materia de fletes y transporte.
X. Combatir
sin piedad, la “piratería” y el tráfico de influencias
(1) Perspectivas Mexicanas desde Paris. Un dialogo con Carlos Fuentes, James R. Fortson (1973) pág. 18
(2) La Democracia en América del Norte, Alexis de Tocqueville, tomado de Diccionario de la Democracia Tomo II, Placeres, Patricio Marcos, página 1377 Editorial Miguel Porrúa, 2010
(3) Patricio Marcos, Diccionario de la Democracia, Editorial Miguel Porrúa 2010, p. 1110, Literatura: Littera es la voz latina más remota para designar el vocablo letra… su colectivo litterae (del griego gramatta) es el nombre de la carta (del griego epístola)… Litteratura el saber que atañe a las letras, del que forma su pieza clave el arte de escribir y leer… razón por la cual el letterator es quien enseña las letras o el alfabeto, el maestro de gramática… entonces la voz Literatura nombra toda clase de obra escrita… que mete en un solo costal lo mismo ensayos y textos magistrales, poesía, letras clásicas, que drama, ficción e incluso lo que el comercio voraz global y plutocrático denomina best sellers, en vez de las belles letteres.
(4) LibrArte La Librería de Tejupilco IX Premio Nacional de Librería 2016 p. 4
(5) Librarte la Librería de Tejupilco, óp. cit. p. 3
(6) Cristina Garcia al recibir el Premio Nacional de Librería: paráfrasis de Gabriel Zaid, “El Progreso improductivo” Editorial Océano, 1999
(7)Txetxu Barandiarán https://lasaiblog.wordpress.com/2017/06/17/librarte-en-tejupilco-tres-mujeres-a-contracorriente-en-una-sociedad-sin-libros/
* Editartex se suma a Librería LibrArte y al Instituto Cultural DanzArte, en Tejupilco México.
(8) Claudia Diana Garcia Pineda. DanzArte. Reporte de Autoempleo Profesional
(9) LibrArte ¡Salir Afuera! Programa de Fomento a la Lectura y la Escritura en el Sur del estado de México https://temascaltepec.blogspot.com/2017/09/libr-arte-lalibreria-de-tejupilco.html
(10) Villanueva Ernesto. Librarte, un caso de éxito en tierra de nadie, PROCESO 2162,15 abril, 2018
* Paco Ignacio Taibo II, “al asumir el timón del Fondo de Cultura Económica”, Excélsior 21/01/2019
(11) Flores Ramírez Ma. Del Pilar Elizabeth. Librerías de barrio como vehículo de prácticas creativas para la resistencia. Revista propuesta para la publicación: Contention http://contentionjournal.org
(12) Flores Ramírez Ma. Del Pilar Elizabeth óp. Cit.
(13) Librarte la Librería de Tejupilco, óp., cit, p. 3
(14) Luis Guillermo Garcia http://librartelibreria.blogspot.com/2018/11/las-librerias-y-la-cuarta.html
(15) Patricio Marcos Óp. Cit. pág.
(16) Patricio Marcos óp. Cit. p 1110
(17) http://digitalismo.com/hacia-una-contranarrativa-del-digitalismo-sobre-los-monopoliosgafa/
* Antes de 2017 solo se consideraban a las bibliotecas públicas, salas de lectura, sociedad civil, empresas, escuelas y hasta en “otros espacios educativos”(17) http://digitalismo.com/hacia-una-contranarrativa-del-digitalismo-sobre-los-monopoliosgafa/
(18) Patricio Marcos óp. Cit. p. 1376 “En las democracias, se está muy lejos de que todos los hombres que se ocupan de la literatura hayan recibido una educación literaria… tales hombres no podrán adquirir jamás el conocimiento bastante profundo del arte literario… (Que) los lleva a buscar solo libros que se consiguen y se entregan con facilidad, como las prostitutas, que se leen pronto y sin pérdida de tiempo –el tiempo que poco les falta para transfigurar en dinero del time is money- literatura más rápida inclusive que la fast food de nuestros días… puesto que el lector la recibe casi toda digerida… lista para tragarse sin necesidad de masticarla ni ensalivarla… los ingredientes ideales que deben tener los escritos emociones intensas, efímeras y fuertes; flashes sorpresivos; pero sobre todo el brillo del oro sin serlo… bizarro, deliberadamente incorrecto, sobrecargado, fofo, atrevido y vehemente… Se buscará asombrar antes que complacer y se esforzará enganchar las pasiones antes que encantar el gusto…”
(19) Gerardo Kloss Fernández “La Maestría en Diseño y Producción Editorial”, OMNIPROM 2016
(20) Jason Epstein; La industria del libro; Anagrama, pág. 50-51, del Blog Cambiando de tercio
(21) Luis Guillermo Garcia Las Librerías y la República en México XV COLIME 2018. Citas elaboradas con base en Patricio Marcos, La Vida Política en occidente pasado, presente y futuro, Miguel Ángel Porrúa, Senado de la República LXI Legislatura, (2012)
* Paco Ignacio Taibo II en la presentación de la #EstrategiaDeLectura (Mocorito Sinaloa 27 enero 2019) entiendo la sentencia de acuerdo a la etimología de milagro que encuentra su origen en el latín miraculum, derivada del verbo mirari, que significa «admirarse» o «contemplar con admiración, con asombro o estupefacción». https://es.wikipedia.org/wiki/Milagro
(22) https://spain.scbwi.org/2017/02/20/charlando-con-sonia-verjovsky-librera/
(23) Sonia Verjovsky, Red de Librerías Infantiles y Juveniles Independientes de México (2016)
*En este caso,
hay que revisar los estatutos y las prácticas democráticas, para justicia de
todos los afiliados a ALMAC o cualquier
otra asociación donde estemos efectivamente representados.
**La
creación de la CANACINTRA a instancias del Presidente Manuel Ávila Camacho,
frente a la flagrancia de la Segunda Guerra Mundial, sería el escenario al que
se podría acudir y reunir en una cámara
a librerías, asociaciones, e institutos encargados de las librerías y
del fomento a la lectura.
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